Comienza la novena jornada de ruta, hoy descansamos bastante, hemos aprovechado para hacer coladas, y quedamos un poco mas tarde de lo habitual, tenemos una fuga de aceite en una moto, nada grave, pero incordioso, decidimos que Gon, el guía vaya con el viajero del problema a un concesionario a solucionarlo, y mientras, el grupo, va con Lola, la otra guía del viaje.
El grupo llega a Pop´s Arcadia, una gasolinera peculiar, restaurada y que es un universo de miles de sodas de todos tipos, para los amantes de esta bebida, un paraíso.
Mientras, en el concesionario, esperando a que se termine de solucionar el problema, las sonrisas, son la mejor muestra de que los pequeños inconvenientes no suponen malestar, si no todo lo contrario, sirven para estrechar lazos.
El grupo sigue su ruta, Arcadia Round Barn, es un antiguo granero, grande y redondo, fue pasto de las llamas tiempo atrás, y fue restaurado, ahora es un museo en su planta baja, y en su planta alta, sirve para hacer clases de baile y pequeñas fiestas locales.
El Museo Seaba, e genial, Jerry, la persona que lo regenta, es fantástico, un amante de las motos, faltaría mas en un museo de motos. Allí pudimos ver variedad de motos clásicas.
De nuevo visita a otro museo
Toca comer en el famoso Rock Cafe, aquí nos reunimos los 2 grupos de nuevo, el problema de la moto ya está solucionado.
Los puentes de hierro, son otro emblema de la 66, el puente Orzak es uno de ellos, poco después de cruzarlo, hay un autocine en ruinas, y aquí podemos ver, bajo el asfalto moderno, el asfalto original de la 66, como queriendo asomar de nuevo, con ganas de resurgir.
Destino completado, tenemos el concesionario Route 66 al lado de nuestro hotel, así que algunos aprovechan para visitarlo y hacer algunas compras.
Cena en al famoso Tally´s, encantador, buena comida, y ambiente genuino.
Se nos va acabando el día, a unos antes que otros, a 2 minutos andando del hotel, hay un bar biker, con buena música y genial para acabar el día.
Hasta mañana!!!
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